El famoso preparador taiwanés Rough Crafts ha vuelto para sorprender a los entusiastas de la personalización con una extraordinaria transformación de la Yamaha Ténéré 700 en una moto flat track.
La última creación de Rough Crafts nos deja sin aliento por la habilidad con la que fue realizada. El alma es de una T7 pero el vestido es de una moto de motocross YZF, un trabajo nada fácil y fruto de innumerables modificaciones.

El objetivo del equipo de Rough Crafts era crear una versión única de la tan querida Ténéré 700, aprovechando las formas y líneas de la más elegante motocicleta de motocross YZ450F. Pero eso no es todo. Se han eliminado varios componentes de la versión modificada.
Según Rough Crafts, el primer paso fue cortar el marco de acero de la Ténéré y reemplazarlo por el marco de aluminio de la YZ450F, lo que permitió instalar directamente los plásticos de la motocicleta todoterreno. El sistema eléctrico ha sido “adaptado” y el depósito de combustible es artesanal y tiene una capacidad de algo menos de 7 litros, 6,8L para ser exactos, lo que permite que los plásticos personalizados encajen a la perfección.

No se trataba simplemente de modificaciones estéticas: para mejorar el chasis se instalaron suspensiones Öhlins a medida, específicas para flat track, y un juego de ruedas específicas, realizadas por Roland Sands Design, otro nombre referente en el mundo de la customización. Uno de los elementos más racing de la moto es el escape que está oculto tras la placa trasera, como en las motos de motocross.
El peso es extremadamente bajo, tan solo 158 kg, lo que hace que esta T7 ‘Flat’ sea extremadamente ligera y ágil en movimientos, y en este hecho también influye sin duda el bajísimo centro de gravedad. Además, con un asiento estrecho y plano y un manillar muy ancho, es más fácil moverse en el asiento para poder deslizarse con seguridad.

Rough Crafts, ya conocida por sus extraordinarias personalizaciones, confirma una vez más su condición de referente en el sector. Con este Flat Tracker basado en la Ténéré 700, el preparador taiwanés demuestra una vez más su capacidad para combinar innovación, diseño y prestaciones en una única obra de arte sobre dos ruedas.
Fonte: moto.it